Las protectoras de animales no tienen la obligación de recoger animales de particulares.
La mayoría de las veces no tenemos espacio físico ni ayuda económica para hacernos cargo de más animales, por lo que resulta imposible recoger un animal con propietario u otro de la calle.
Si no quieres a tu animal, tienes que contactar con el centro de recogida que te corresponda, ellos te informarán los pasos a seguir.